Alerta Amazónica, un grupo de documentalistas y activistas internacionalistas, se encuentran en la provincia de Atalaya (Ucayali) para realizar un documental sobre los impactos del proyecto Camisea a lo largo de su recorrido (de la selva al pacífico). El siguiente es un artículo que acaban de enviarnos sobre los pueblos en aislamiento voluntario en la zona y el peligro que significa la última asociación (en junio) entre PetroVietnam y Repsol.
El último tic-tac de los pueblos aislados.
Amenazas a los pueblos invisibles de la Amazonía
Por Marc Gavaldà / Alerta Amazónica
Sepahua , 13 de julio.- Son decenas de miles las comunidades indígenas que viven en los bosques de la Amazonía peruana. Sus culturas y modos de vida describen un proceso – a diferentes velocidades pero imparable- de asimilación a los patrones occidentales.
A medida que aumenta el consumo de productos prescindibles y ajenos, la entrada de iglesias de todo color, la irresistible atracción a los centros poblados o la contratación de comunarios como mano de obra en actividades extractivas, los pueblos originarios cada vez se parecen más entre ellos. Y a la vez se parecen más a la sociedad mestiza.
Sin embargo, algunas fracciones de estos pueblos siempre han rechazado voluntariamente este contacto asimilatorio, adentrándose a las regiones más inhóspitas. Los reportes sobre su existencia, expresan que cualquier ingreso a sus territorios es sentido como una amenaza a la cual se defienden. Por eso, los calatos, habitantes desnudos de la selva, despiertan respeto y temor a todas aquellas personas que entran a esas regiones buscando madera o petróleo.
En la actualidad, el avance de la frontera petrolera, los proyectos de conexión vial transfronteriza y un nuevo reglamento que permitiría la entrada en Reservas Territoriales creadas por el gobierno peruano para su protección, amenaza seriamente la supervivencia de los últimos pueblos en aislamiento voluntario del Perú.